miércoles, 9 de octubre de 2013

Peñaflor, el Finisterre Arañuelo

Hola arañuelos,

Tumbas romano-visigodas y Peñaflor al fondo
volvemos una semana mas, y esta vez con uno de los lugares mas especiales del Campo Arañuelo. Objetivo, el roquedo de Peñaflor, en Berrocalejo.

La zona ha estado habitada desde tiempos inmemoriales, y testigo de ello son los muchos elementos que nos encontraremos a lo largo del camino. Restos romanos como sillares de edificios o un miliario, tumbas visigodas, ruinas de la atalaya y poblado árabe, zahurdas de pastores... y mucho mas que ahora os enseñaremos, hacen del entorno de Peñaflor y Berrocalejo un lugar único de nuestra tierra por patrimonio y paisaje.

Nosotros hemos planteado la ruta en dos niveles, uno inicial con el sendero marcado en toda su extensión, y un segundo nivel en el que hay que abrir/saltar un par de porteras, siguiendo el recorrido de la marcha que organiza el ayuntamiento de Berrocalejo. Página del ayuntamiento de Berrocalejo.



Ruta a Peñaflor

Tipo: Circular
Km: 6.5 km
Dificultad: Baja, con alguna zona escarpada.
Medio: caminos, veredas y campo través.
Inicio/Fin: Pilón de Berrocalejo, tras la plaza del ayuntamiento.

Observaciones: Sin fuentes, evitar horas centrales en días de mucho calor. Es una ruta pensada para andar, tiene tres porteras. Puede haber ganado suelto. 

Muy importante: 
Nivel 1. La ruta esta marcada con postes blancos y verdes desde el pilón hasta Peñaflor y es asequible para todos los públicos. En nuestro mapa os la marcamos también así (blanco y verde).
Nivel 2. Si la realizáis como la indican en la página de Berrocalejo y describimos aquí, la mitad inicial de la ruta no tiene señalización y hay que abrir/saltar un par de porteras por lo que tendréis que estar ágiles. Coincide en su parte final con el nivel 1, así que cuando encontréis la señalización, deberéis seguirla en sentido contrario a lo que os marca. En nuestro mapa os la marcamos en rojo.

Comenzamos la ruta en el pilón del pueblo. Desde aquí parten dos caminos, uno que deja un parque a la derecha y que esta marcado por las señales blancas y verdes, instaladas por la comarca del campo arañuelo extremeño. Tiene un cartel explicativo de la ruta. Esta seria la correspondiente al nivel 1, marcas verdes y blancas en nuestro mapa. Por aquí veréis las tumbas y lo mas próximo a Peñaflor. El recorrido es de ida y vuelta por el mismo camino.
Nosotros  en lugar de seguir esta ruta, cogemos el camino que deja a la izquierda el parque, y en medio km ya tenemos la primera y segunda portera. Seguramente la primera este cerrada y toque saltar. Continuamos por la Dehesa Boyal, subiendo ligeramente por una pista en buen estado para el paseo, con unas buenas vistas de Berrocalejo a nuestra izquierda.

Continuamos nuestro camino hasta acabar la subida y llegar a un cruce. Aquí seguiremos de frente, ligeramente hacia la izquierda por una pista algo desdibujada al principio pero que despeja en pocos metros y se intuye fácilmente. Seguimos bajando y como a 500 metros, en la primera gran Z que hace el camino veremos a la derecha en lo alto del cerro, los zahurdones, construcción típica del cuidado para el cuidado de los cerdos en las dehesas.
Continua aquí el camino descendiendo hasta el cauce del arroyo del conde o Fardazoso, que cruzaremos sin problemas, para subir nuevamente otro cerro. En lo alto nos espera una nueva portera a saltar.
El siguiente tramo sera el único que requiera un poco de orientación, ya que no existe camino y es campo a través.
Fijando el rumbo en Peñaflor, que ya podemos verlo, avanzamos por un espacio mas desierto de arboles. Si desviáis un poco el rumbo a vuestra derecha, sin acercaros mucho al río manteniendo os por la parte alta del terreno, antes de llegar a Peñaflor pasaréis por otro cancho espectacular.
Cancho frío es una formación de cuatro canchos, apilados y apoyados, que dejan un mirador incomparable, digno de visitar.

Y ya tenemos si que si, la mira puesta en Peñaflor. Es a partir de aquí donde comenzamos a ver montones de piedras, que se corresponden con parte del poblado árabe que aquí existió, también parte de la muralla o empalizada que defendía la atalaya y algunos restos de sillares romano de la vecina Augustobriga, 3 o 4 km aguas abajo del río Tajo. 

Peñaflor desde Cancho Frío
Vista de la peña del mochuelo y de los molinos del duque de Frias, a la izquierda
Desembocadura del Tajo en Valdecañas

Y por fin llegamos a nuestro ecuador de la ruta y gran objetivo, la base del roquedo de Peñaflor. Impresionante esta mole natural de roca que se alza sobre Tajo y Valdecañas, cual Finisterre sobre el atlantico, todo un lujo a 20 minutos de cualquiera de nuestros pueblos.




Señal de las rutas del
Campo Arañuelo Extremadura
A partir de aquí encontramos la señalización blanca y verde que comentábamos al principio, pero con el sentido de la ruta indicando Peñaflor. Tendremos que "deshacer camino" siguiendo estas balizas. Quien las haya seguido desde el inicio solo debe volver sobre sus pasos.

Para salir de la base de Peñaflor, tenemos que volver a cruzar los restos de la empalizada de la atalaya árabe, para a continuación dirigirnos hacia una pequeña elevación que tenemos enfrente.
Aquí se encuentra la necrópolis romano-visigoda, con túmulos y tumbas excavadas en la roca o en canchos. Y es que este lugar no ha dejado indiferente a las personas que aquí han habitado.



Piedra de referencia para localizar las zona

Vista de Peñaflor y el Tajo desde la necropolis
Dejando atrás este último punto de historia, encauzamos de nuevo las señales hacia el pueblo. Si tenemos ganas de seguir un poco mas, nos encontramos un camino que sube a la derecha por una empinada cuesta y sin meter ningún km extra a la ruta, podemos disfrutar desde lo alto de la Nebrosa (Vértice geodésico: V.G. 65358 - Nebrosa) de unas inmejorables vista del paseo que acabamos de recorrer. Si no, pues seguimos las balizas, que nos guían subiendo un cerrete hacia una alambrada, para después encontrar una pequeña portera que debemos abrir sin problemas. Continuamos hasta un paso canadiense al que también viene a parar el camino que baja desde el alto de la Nebrosa.

Desde aquí seguimos el camino recto, sin perdida y cuesta abajo hacia Berrocalejo, por una pista en unas muy buenas condiciones. Si habéis ido por la mañana, momento ideal para tomar algo en algún bar, y si vais a ultima hora de la tarde, para deleitarse con los últimos rayos del sol. Nosotros como veis, hemos optado por esta opción.

Os dejamos el track para movil o gps en wikiloc.com, ademas del mapa de la ruta que hemos puesto al inicio. El resto de las fotos de la ruta en nuestra pagina de Facebook

Esperamos que os haya gustado el paseo y que os animéis con alguno de los dos recorridos que os hemos propuesto. Como siempre, uniendo historia, naturaleza y deporte para todos, ¿puede haber mejor combinación?

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